Más de mil personas asisten a una misa con música de Taylor Swift
La famosa Iglesia del “Espíritu Santo”, de Heidelberg, un majestuoso edificio de 600 años de antigüedad ubicado en el centro histórico de la ciudad alemana, se convirtió en el escenario de un inusual servicio religioso el pasado domingo.
Reuniendo a alrededor de 1.200 personas, este evento singular combinó la solemnidad de la oración con el ritmo y la melodía de las canciones de la estrella del pop estadounidense “Taylor Swift”.
La iniciativa fue concebida por la iglesia protestante alemana, con el objetivo de atraer a una audiencia más joven y al mismo tiempo profundizar en las convicciones religiosas expresadas en muchas de las canciones de Swift.
Si bien la cantante no estuvo presente físicamente en la ceremonia, su influencia espiritual se hizo sentir a través de la interpretación de sus canciones, que resonaron en los antiguos muros de la iglesia.
El pastor de Heidelberg, Christof Ellsiepen, destacó la relevancia de este servicio religioso, afirmando que la Iglesia del “Espíritu Santo” siempre ha sido un lugar de encuentro e intercambio y que este evento proporcionó un espacio para abordar los dilemas y las preocupaciones de la generación más joven.
A pesar de la atmósfera que podría sugerir un concierto, la misa transcurrió en gran medida en un clima de silenciosa devoción, con el pastor parroquial Vincenzo Petracca citando numerosas letras de la artista estadounidense y trazando su biografía para resaltar su conexión y comprensión del cristianismo en la vida cotidiana.
A lo largo de los dos servicios dominicales programados para dar cabida a la gran cantidad de asistentes, la congregación, notablemente femenina y más joven de lo habitual, pudo disfrutar y participar de seis canciones de Taylor interpretadas por “Tine Weichmann” y su banda.
Este evento, conocido como “Anti-Hero”, se suma a una serie de servicios de “City Church Rock and Pop” que comenzaron en 2015, mostrando cómo la música popular puede servir como vehículo para la expresión espiritual y la conexión comunitaria.