En una época en donde las ciudades más importantes del mundo sacan a relucir sus mejores adornos de cara las fiestas de fin de año, Roma no ha sido la excepción. Sin embargo, la intención de las autoridades locales de embellecer a la capital italiana en esta oportunidad fue un fiasco absoluto.
O al menos ese es el sentimiento que han manifestado mucho de los romanos en Twitter después de que la Piazza Venezia amaneciera con un árbol navideño completamente marchito. El mismo, que fue traído especialmente desde Austria y costó 50 mil euros, se ganó el apodo de “Spelacchio” (algo así como pelado en español) y una popularidad inesperada.
Tanto es así que en pocas horas el arbolito llegó a tener su propia cuenta en la red social del pajarito, y desde hace días que los usuarios no dejan de burlarse de su particular apariencia.
Y es que “Spelacchio” deja mucho que desear: aunque tiene una altura considerable y está decorado con varias bolas navideñas, apenas tiene hojas y muchos de los peatones que circulan por el lugar aseguran que sólo verlo produce “tristeza”.
Pero lo que empezó como una broma inocente terminó convirtiéndose en un verdadero debate político. Muchos de los romanos aprovecharon la ocasión para criticar a la alcaldesa de la ciudad, Virginia Raggi, y decir que árbol no es otra cosa que un símbolo del estado de abandono total de la ciudad de Roma.
Aunque desde el gobierno han intentado echarles la culpa del estado catatónico del arbolito a los encargados de trasladarlo, lo cierto es que los habitantes de la ciudad no parecen creer demasiado en estas excusas y sólo esperan tener una mejor decoración de Navidad el año que viene.